Título: Géminis
Director: Ang Lee
Reparto: Will Smith, Clive Owen, Mary-Elizabeth Winstead, Benedict Wong
Producción: Jerry Bruckheimer
Nacionalidad: EE. UU., 2019
Estreno en España: 11/10/2019
A punto de jubilarse, Henry Brogan (interpretado por Will Smith), trabaja como asesino a sueldo para el gobierno estadounidense. Su vida es idílica pero solitaria, en una cabaña en medio de la nada. Todo se complica cuando le vuela la cabeza a quien no debe. Si bien es cierto que él es el mejor en lo que hace —siendo capaz incluso de asesinar a un manipulador genético, a bordo de un tren de alta velocidad, desde kilómetros de distancia— nuestro adorado príncipe de Bel Air, en versión 007, debe morir (aunque no se explica en ningún momento bien el por qué).
Entre tanto, poquito antes de que empiece la masacre en que se convertirá su persecución, conoce a la encantadora Danny, a quien encarna Mary-Elizabeth Winstead (Fargo, Matad al mensajero). Danny es una agente encubierta, cuya tapadera durará poco tiempo, convirtiéndose también en objetivo de su propio gobierno, tras ayudar a Henry.
La trama se complica todavía más, cuando otro joven asesino a sueldo, contratado para preceder a Brogan, va tras ellos. El chaval, adoctrinado desde pequeño para ser una máquina de matar, resulta ser también Will Smith, pero con 30 años menos.
El filme en sí es un inmenso despliegue de efectos especiales sensacionales. Su director Ang Lee (ganador de varios premios Oscar por películas como La vida de Pi o Brokeback Mountain) parece haber dejado de lado el apostar por una buena historia centrándose, con esta superproducción, en abusar de la realidad virtual. La película está dispuesta para tecnología 3D HFR (High Frame Rate) a 120 fotogramas por segundo (el estándar cinematográfico está en 24 fps).
Si bien el nivel técnico y visual es extraordinario, así como toda una delicia para verlo en la gran pantalla; llega un poco adelantado para su tiempo, dado que no muchos cines están acondicionados para este tipo de material.
En cuanto a interpretación, la de Will Smith no podría ser más impecable. Además merece la pena ver a su compañero de reparto Clive Owen (Closer, Sin City: ciudad del pecado) haciendo de malo malísimo.
Estoy con Lee en que hace falta apostar por las nuevas tecnologías cinematográficas, pero si ello se convierte en algo excesivo, si se trata de una trama tan plana, resulta verdaderamente lamentable.
